Cómo medir el pH del suelo

Lo más importante es poder saber cuáles son las diferencias entre los niveles de pH, pues estos son con los que se conoce si un elemento analizado tiene un grado de acidez u otro. El pH es la referencia en relación al potencial de iones de hidrógeno, pudiendo categorizar al elemento que se analiza en una escala de valores que se engloban, entre: muy ácido, neutro o muy alcalino.

Según el valor de pH del suelo, los nutrientes se absorben de una forma u otra por las plantas que allí se encuentran. En relación a esto, el tratamiento que se hace sobre unas u otras, debe depender del análisis del pH del suelo hecho previamente. Uno de los métodos más habituales es el siguiente:

  • Se toma una muestra de tierra, previamente secada a unos 40ºC durante varias horas.
  • Esta muestra de tierra se tamiza con un tamiz de 2mm.
  • Coger una muestra y pesar 20g de tierra.
  • Preparar la tierra para su dilución.
  • Añadir la muestra a un vaso de precipitados con 50ml de agua destilada.
  • La mezcla se agita durante tres minutos.
  • Posteriormente, ésta se deja reposar durante 15 minutos.
  • Ya está lista la muestra para medir el pH en el sobrenadante.

A través de los resultados obtenidos por medio de este proceso, se llega a conocer el pH del suelo sobre el cual deseamos trabajar, especialmente si éste se requiere para conrear, plantar un huerto, u otras labores que requieran optimizar la forma en que se absorben los nutrientes.

En el estudio de la alcalinidad de los tipos de suelo, el rango habitual del pH del suelo es de 4.0 a 8.0 pH, de forma que la disponibilidad óptima de nutrientes por parte de la mayoría de cultivos es de 6.5 a 7.0 pH. Si el análisis como se ha comentado en este mismo artículo no se puede realizar por ese procedimiento, existen diferentes kits sobre cómo medir el pH de la tierra. Para poder realizar estas mediciones, en LabProcess trabajamos con diferentes productos de laboratorio como medidores de pH. Si la medición necesita realizarse fuera del recinto de trabajo, sería necesario poder optar por un pHmetro de bolsillo, pero si se puede trabajar en el laboratorio, nuestros proveedores cuentan con los mejores medidores de pH portátiles. Aun así, las lecturas del análisis de suelo para calcular el pH de una muestra de tierra, pueden variar según la forma en que se hace la medición.

 

Cuál es el pH óptimo para distintos cultivos

Dependiendo de cuál sea la planta que se quiera cultivar, existen diferentes valores de pH de la tierra que hay que tener en cuenta, para optimizar el cultivo. Como hemos recordado previamente, el valor de la alcalinidad del suelo influirá en la forma y el nivel de nutrientes que absorben los cultivos.

Algunos tipos de cultivos como el centeno, la patata, las pratenses, requieren de una ligera acidez en el pH del suelo. Por su parte, el pimiento, la alfalfa, el tomate y la remolacha, se cultivan mejor en suelos con un pH alcalino ligeramente elevado.

Cuando se trata de un suelo con un pH ácido es porque se encuentran minerales como el zinc, el aluminio, cobre, cobalto y el manganeso, los cuales se solubilizan y se encuentran disponibles para la absorción de las plantas. Si nos encontramos con un terreno donde estos elementos están presentes por encima de los valores habituales y recomendables, estaríamos hablando de que esa tierra es tóxica para las plantas, por lo cual no se debe optar por cultivarlas.

Es muy importante tener en cuenta que diferentes tipos de lluvia, así como la época del año en que se dan, y el nivel de contaminación del entorno, influyen en el nivel de pH de la tierra. Por esta razón, es muy importante poder realizar unas mediciones periódicas del pH en el suelo con el que se está trabajando, de forma que puedan crecer sin ningún problema los elementos que allí plantemos y cultivemos.